En Sao Paulo, Brasil, una mujer escuchó gemidos y quejidos de un sitio cercano a la tumba que visitaba. Provenían de debajo de la tierra del que salieron unos brazos.
"Yo estaba aterrorizada al ver a un hombre, que pensé que estaba muerto tratando de salir de la tumba", contó la mujer, que pidió no ser identificada.
Espantada de miedo, huyó despavorida, pero llamó a la policía, que creyeron que se trataba de una broma de mal gusto y la acusaron de hacerles perder el tiempo.
El hombre efectivamente se encontraba en la tumba del cementerio, a punto de morir asfixiado cuando fue desenterrado y ahora está hospitalizado, recuperándose.
La policía piensa que el "muerto vivo" estuvo involucrado en una pelea en la que se llevó la peor parte. Sus agresores creyeron que había muerto y lo tiraron en una fosa del cementerio.
Fuente: El Intransigente