El tatuador que devolvió la confianza a las mujeres con mastectomías. Mira el vídeo

El arte del tatuaje ahora también es medicinal. Desde su estudio de Maryland, Vinnie Myers ya ha tatuado más de 4.000 pezones a mujeres que sufrieron esa operación.

Hay enfermedades que no afectan sólo al cuerpo, sino también al alma. Acostumbramos a pensar en las cicatrices como marcas dolorosas para la piel, pero nos olvidamos de lo mucho que esas mismas señales dolerán en la mente. Las mutaciones, los cambios y las manchas involuntarias son verdaderos problemas para el ánimo, y a veces pueden incluso resultar peligrosos, o acarrear más problemas. Afortunadamente la muestra y estudio de estos males son cada vez menos tabú y parece que la red ha propiciado la aceptación de muchas de ellas. A veces sólo con dar visibilidad a un problema, este puede terminar por normalizarse.

En la actualidad, una de las enfermedades más difíciles de superar y de olvidar es la del cáncer de mama. La historia de esta dolencia siempre ha venido ligada al cuerpo femenino y sobre todo a los resultados que produce en el aspecto de las mujeres. En esta lucha continua contra el cáncer, parece que poco a poco también se han ido ganando batallas. De hecho, recientemente se ha viralizado un pequeño documental de The New York Times en el que se cuenta cómo un tatuador estadounidense decidió enfrentarse a la enfermedad de las mujeres, tatuándoles un pezón sobre sus pechos operados.