Digamos que mediante el uso de sales de baño unos investigadores han transformado una bañera en una pantalla opaca en la que proyectar aplicaciones; si a eso le añadimos una Kinect y el hecho de que nuestros dedos pasen a ser cursores tendremos el AquaTop Display, un prototipo de nuevos juegos en la bañera.
Ya os podéis ir olvidando del patito de goma, las representaciones de históricas batallas navales y, sobre todo, eso de sacar las rodillas por encima del agua como si fueran montañas y colocar figuras en lo alto para mantener conversaciones entre dos tipos aislados por un valle de zombis. Se acabó. A partir de ahora, bañarse será como un viaje de LSD, algo así como la escena de Miedo y asco en Las Vegas pero sin radio. Y sin chaqueta, a poder ser.
Fuente: No puedo creer