Una mujer de unos 20 años fue ejecutada en público esta semana en la provincia de Badghis, donde el grueso de las tropas españolas se encuentran destinadas en el noroeste de Afganistán, después de que los líderes de la comunidad la acusaran de adulterio. El propio padre de la joven disparó el gatillo que acabó con su vida, al considerar una ofensa para el honor de la familia que la muchacha fuera en teoría infiel a su marido.
En Afganistán es delito mantener relaciones sexuales fuera del matrimonio, y está penado con hasta quince años de cárcel. Pero en este caso no existen testimonios que corroboren que la mujer realmente fuera infiel, según ha destacado un líder provincial que solicitó que se mantuviera su anonimato. El padre de la chica huyó tras matarla.
Enlace: Noticia ElMundo
