Una terapeuta británica instaló un inusual negocioen la bella costa este de Kent. Kitty Mansfield dice especializarse en abrazos profesionales, promocionando sus beneficios tanto fisiológicos como psicológicos.
Mansfield es una terapeuta reconocida desde hace diez años. Pero si antes se dedicaba a aconsejar a sus pacientes, hoy prefiere sencillamente abrazarlos.
La doctora afirma, citando investigaciones científicas respetadas, que los abrazos liberan oxitocina: una hormona que genera placer, que ayuda a crear una sensación de felicidad y un confort muy agradable. Además, el contacto físico con otros individuos puede llegar a bajar la presión arterial y el estrés, indica la británica de 45 años de edad. Recalca también que sus servicios consisten en ofrecer ese placer a clientes masculinos y femeninos.
El sitio se ubica a sólo 75 minutos de Londres en tren de alta velocidad. Los costos van desde 70 dólares por “un abrazo individual” hasta los 200 dólares por “un abrazo estereofónico” de 90 minutos.
Leer más: Noticia El Intransigente