Soltad las tarjetas de crédito y poned las manos donde pueda verlas: estos zapatos no están a la venta. Nixxi Rose los ha creado para provocar envidias y ansias de poder por doquier.
Hay que decir que, a pesar de todo, parecen más cómodos que el Trono de Hierro (lo cual tampoco es un mérito). El problema radica en su estabilidad: como hemos podido comprobar, el Trono de Hierro no está por la labor de soportar el peso de alguien durante mucho tiempo. Es un traidor a su propia raza mobiliaria, sedentaria por definición. Vamos, que para ser un sofá con espadas es bastante agitado.
Es probable que estos zapatos adolezcan del mismo carácter y se las apañen para acabar con cualquiera que decida usarlos. Con eso no me refiero a que tengas que quitártelos a las siete de la madrugada y volver a casa descalza, borracha, registrando las paredes como si ocultaran runas mágicas y haciendo de bolita de pinball contra las papeleras. Es decir, eso también. Pero el efecto añadido es que probablemente sufras una muerte horrible. Horrible según nuestro parecer, claro, que para los de Poniente apretar una cabeza y hacerla estallar es una merienda-cena.
Fuente: No puedo creer